Amén, a mi biblia. Me persigno ante ella dando una hojeada y prometo ser fiel a sus mandamientos. Aquí no hay profetas apócrifos, pero sí mucha lectura y publicidad, quizás el único pecado de este ejemplar. Mi biblia es universal y mensual; viene en varios colores. Quizás no está doblada a todos los idiomas, ni menos es un best seller, pero sí que cuenta con los más grandes profetas de las crónicas, perfiles, ensayos, foto reportajes y cuentos. Se trata de Etiqueta Negra o conocida como: “Una revista para distraídos”, puesto que soy una distraída, la leo con devoción y sí he de pagar una penitencia eterna por andar tan volada, sería leer más y más Etiquetas Negras, las cuales conseguiría a dos soles en Quilca o Amazones. Sí, la fé cuesta, el placer de leer uno de estos ejemplares no tiene precio. El culpable de tanta fe loca es Julio Villanueva Chang, un distraído de primera, jamás estudió periodismo por ende no le inculcaron sermones de ética y tanta vaina, como él diría: “Cuando alguien habla de tanta ética es porque algo anda mal”, y es que la ética no se dice, se practica. Así nace Etiqueta Negra, bajo la utópica idea de un chino que quería hacer algo, no sabía qué, solo sabe que lo hizo. Se juntó con otros locos de su especie, no ganaban ni un centavo solo prestigio, se hicieron millonarios. Su pasión por hacer lo que más les gustaba, escribir y leer, los llevó a donde están ahora, a miles de kilómetros de distancia los uno de los otros, siguen no ganando dinero, pero el prestigio nadie se los gana, porque escribir en Etiqueta Negra de por sí es prestigioso y te hace emocionalmente millonario. Es así como crearon una revista que reúne lo mejor del mundo del periodismo y a los mejores escritores del nuevo periodismo, valga la redundancia, quien no haya leído y gozado de sus crónicas, perfiles o ensayos, no ha vivido. Ojo, nunca es tarde. Escritores como Julio Villanueva Chang, Daniel Titinger, Juan Villoro, Gay Talese, Jon Lee Anderson, Juan Pablo Meneses, Juan Manuel Robles se reunen aquí y conforman esta biblia literaria. Es octubre, un mes de milagros, dicen. Solo le pido a Quilca y Amazonas que me permitan encontrar la edición 0, 1, 2 y 3 , mientras yo empezaré con mi procesión misma: Marco buscando a su mami; misma Angel buscando la flor de 7 colores, mismo Goku, buscando las esferas del dragón. ¿Y tú eres un distraído?

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